El Mysore style es una modalidad tradicional de enseñanza dentro del sistema de Ashtanga Vinyasa Yoga. A diferencia de las clases dirigidas en las que todos los estudiantes siguen la misma secuencia a la par, en el estilo Mysore cada estudiante realiza la secuencia de Ashtanga Vinyasa de manera individual, a su propio ritmo y nivel, mientras recibe atención personalizada por parte del instructor.

Estructura típica de la clase Mysore:

  1. Llegada y Preparación: La clase comienza en un ambiente tranquilo y con espacio suficiente para que cada estudiante se ubique en su propia esterilla. Los estudiantes llegan en el momento que deseen dentro de la franja horaria de la clase (generalmente entre 1.5 y 2 horas), lo que les permite practicar a su propio ritmo. Al principio, el instructor puede hacer una breve introducción o recordatorio sobre la práctica.
  2. Inicio de la práctica con la secuencia tradicional: En el estilo Mysore, la secuencia de Ashtanga se realiza de forma progresiva y personalizada. Cada estudiante comienza con la Saludo al Sol (Surya Namaskar), y luego avanza a través de las diferentes posturas y series (primera, segunda o más avanzadas) según su nivel y habilidad. Los principiantes normalmente comienzan con la Primera Serie (Yoga Chikitsa), que se enfoca en la alineación y la purificación del cuerpo.
    • Saludo al Sol (Surya Namaskar): Todos los estudiantes comienzan con estas secuencias fluidas de posturas que calientan el cuerpo y conectan el movimiento con la respiración (vinyasa).
    • Posturas de la Serie Principal: Las posturas se practican en un flujo continuo, siempre enlazadas por la respiración, de modo que cada movimiento está sincronizado con una inhalación o exhalación. El instructor puede ajustar las posturas de acuerdo con las necesidades individuales.
  3. Atención individualizada: Mientras los estudiantes practican, el instructor camina entre ellos, ofreciendo correcciones, ajustes, y consejos personalizados. En Mysore, la clase se caracteriza por un enfoque individualizado dentro de un grupo. Los estudiantes reciben instrucciones basadas en su habilidad y su progresión personal, y el instructor proporciona modificaciones para aquellos que necesiten adaptaciones o mayores desafíos.
  4. Uso de la respiración Ujjayi: La respiración Ujjayi (respiración victoriosa) es una parte fundamental de la práctica en el estilo Ashtanga, y se enfatiza durante toda la clase. Es una técnica de respiración controlada que se realiza de manera sonora y consciente, ayudando a mantener la concentración y la energía interna durante toda la práctica.
  5. Finalización con la relajación y la meditación: Al concluir la secuencia de posturas, la práctica termina con una breve relajación (Savasana) para permitir que el cuerpo y la mente se asienten después del esfuerzo físico. En algunas clases, también se puede realizar una meditación breve o una introspección personal. Los estudiantes terminan la clase sentados en postura de meditación, cerrando con un Saludo (Namaste).

Beneficios de la práctica Mysore:

  • Desarrollo autónomo: Cada estudiante tiene la oportunidad de aprender a su propio ritmo y adaptarse progresivamente a la secuencia de Ashtanga. La práctica fomenta la independencia y la autoconfianza.
  • Atención personalizada: La posibilidad de recibir correcciones y ajustes específicos permite mejorar la alineación, evitar lesiones y profundizar en la práctica.
  • Mayor comprensión de la secuencia: A medida que los estudiantes se familiarizan con la secuencia, pueden profundizar en las posturas y comprender mejor los principios del Ashtanga, lo que les permite un mayor crecimiento personal.
  • Mejora de la fuerza y flexibilidad: La práctica constante de Ashtanga desarrolla la fuerza, la flexibilidad y la resistencia física y mental.
  • Desarrollo de la disciplina: El estilo Mysore fomenta una práctica regular y autodisciplinada, que a largo plazo permite una mejora continua.

Público objetivo:

  • Estudiantes de todos los niveles: Desde principiantes hasta practicantes avanzados. Los principiantes se benefician al practicar a su propio ritmo, mientras que los más experimentados pueden seguir avanzando en la secuencia.
  • Personas que buscan una práctica estructurada pero flexible: El estilo Mysore es ideal para quienes prefieren una rutina más autónoma y personalizada, pero dentro de un marco tradicional.
  • Practicantes con horarios flexibles: Dado que los estudiantes pueden llegar a cualquier hora dentro del periodo de la clase, es adecuado para aquellos con agendas ocupadas.

¿Por qué elegir el estilo Mysore?

El Mysore Style es considerado el método más tradicional de enseñanza en Ashtanga Yoga, fiel a la forma en que Sri K. Pattabhi Jois, el fundador del sistema, enseñaba. A través de este enfoque, los estudiantes no solo aprenden la secuencia de forma física, sino que también desarrollan una comprensión más profunda de la filosofía y la espiritualidad del yoga, mientras cultivan una práctica meditativa que va más allá del ejercicio físico.

En resumen, una clase de Ashtanga Vinyasa estilo Mysore permite que los estudiantes profundicen en su práctica individual, recibiendo atención personalizada y adaptaciones según su progreso, todo dentro de la estructura tradicional de la serie Ashtanga. Esto promueve tanto el crecimiento físico como mental, al mismo tiempo que fomenta la autoconfianza y la independencia en la práctica del yoga.